Los enfrentamientos que se han venido presentado en la vereda Los Pozos, Caquetá, entre integrantes de la Fuerza Pública y campesinos, dejó como resultado este jueves 2 de marzo, la muerte de un policía y un campesino. Esta protesta en la base petrolera Energy se da después de 46 días de diálogo entre campesinos y el Gobierno.
El número de heridos sigue subiendo, tanto en civiles como en uniformados. Desde la coordinadora Coscopaas, denunciaron la muerte de un campesino llamado Reinel Arévalo, residente de la vereda El Rubí.
En diálogo con Martha Devia, se habló sobre los días que han estado en la zona y de la exigencia de los campesinos para la pavimentación de cerca de 42 kilómetros de vía. A esto se suma el incumplimiento en la agenda por parte del Gobierno Nacional, la cual fue anunciada por los líderes campesinos.
Por otro lado, la secretaria de gobierno, Sandra Rodríguez, pide respeto a la vida de cada uno de los miembros de la Fuerza Pública, entre ellos el subintendente Ricardo Arley Monroy Prieto, quien también perdió la vida en los enfrentamientos. Rodríguez, dice estar en constante diálogo con la fuerza pública del sector para poder buscar la forma de retomar el orden.
Dada la complejidad de la situación a nivel nacional, se conoció que se llevó a cabo una reunión de manera urgente en la Defensoría del Pueblo, encabezada por Carlos Camargo, donde se tomó la decisión de enviar un grupo de apoyo con 5 (cinco) delegados, 3 (tres) nacionales y (2) regionales, entre ellos DR. Calero, delegado nacional de conflictividad, DR.Tito, director nacional, un asesor de despacho y los defensores regionales por el Meta, Yerman Saldaña y Edisson Martínez, regional Guaviare. Su tarea será ayudar a mejorar los diálogos con el Gobierno Nacional y los campesinos que se encuentran en la zona.
