Un nuevo brote está apareciendo en la comunidad Nukak del asentamiento Agua Bonita. Uno de sus líderes Ober Joonide, asegura que la atención médica que reciben no es suficiente.
Ya son varios los jóvenes indígenas y niños que presentan un brote nuevamente y temen que otros se puedan contagiar. Piden que los atiendan y que en este puesto de salud esté alguien de manera permanente con medicina para que puedan ser aliviadas sus afectaciones de salud a tiempo.