Felipe Henao, de la Fundación Guardianes del Chiribiquete, relató su experiencia tras haber sido becado para representar a los liderazgos juveniles del Guaviare en Europa. Durante su viaje, participó en diversas reuniones, destacando la importancia de la cooperación con la Unión Europea en Colombia. Según Henao, esta colaboración ha sido clave tanto para los jóvenes como para la biodiversidad, no solo en el Guaviare, sino en toda la Amazonía. Uno de los temas centrales que presentó fue la necesidad urgente de apoyar económicamente a las familias que conservan los bosques, quienes suelen enfrentar serias dificultades económicas.
El viaje, que incluyó una intensa agenda de una semana, permitió a Henao conocer de cerca el funcionamiento de las principales instituciones de la Unión Europea, como el Parlamento Europeo, la Comisión Europea y el Consejo. Destacó que uno de los aspectos más interesantes fue aprender cómo estas instituciones trabajan integradas, subrayando que las leyes no las propone el Parlamento, sino la Comisión, la cual actúa como órgano legislativo proponente. Además, tuvo la oportunidad de visitar ciudades y países vecinos, lo que enriqueció aún más su perspectiva sobre los retos globales y las soluciones locales.
Henao enfatizó la necesidad de buscar soluciones sostenibles para los problemas que enfrenta la región amazónica, especialmente en lo relacionado con el manejo forestal. Resaltó que, aunque el camino es desafiante, no se debe desistir: “No por miedo a errar, debemos dejar de intentarlo”, afirmó. También subrayó la importancia de regular la economía entre el mercado y la demanda para garantizar que el desarrollo ambiental y social se mantengan equilibrados.
En cuanto a la COP16, Henao expresó que los avances suelen quedarse en diálogos, pero espera que los resultados se materialicen pronto. Señaló que los núcleos de desarrollo forestal son actualmente la mayor apuesta del gobierno nacional, pero concluyó con una reflexión contundente: “No estamos preparados como región para administrar nuestro bosque”. Sus palabras invitan a repensar las estrategias y a fortalecer las capacidades locales para proteger uno de los ecosistemas más valiosos del planeta.