La ola invernal y la crítica situación de orden público que atraviesa el departamento del Guaviare han golpeado duramente a diferentes sectores económicos. Campesinos, comerciantes, ganaderos, productores de leche y residentes en zonas urbanas han sufrido afectaciones. A esta lista se suma el turismo, un eslabón que había pasado desapercibido, pero que hoy enfrenta una profunda crisis.
Uno de los municipios más afectados es Calamar, ubicado al sur del Guaviare y rodeado por el Parque Nacional Natural Chiribiquete. Jhon Vásquez, enlace municipal de turismo, informó que cinco de las 20 empresas y emprendimientos turísticos del municipio resultaron gravemente impactados. Las lluvias han destruido infraestructuras y paralizado actividades, mientras el deterioro del orden público ha alejado a los visitantes.
Un caso emblemático es el de Las Cachiveras del Itilla, donde las aguas arrasaron con la casa, el kiosko y la cocina del proyecto ecoturístico. Vásquez señaló que los ingresos del comercio local cayeron drásticamente: de facturar 600 mil pesos diarios pasaron a solo 50 mil, lo que evidencia el colapso económico del sector.
Ante esta situación, la asociación MECA Guaviare, que agrupa agencias, guías y prestadores de servicios turísticos, lanzó una donatón para apoyar a los afectados. La campaña se llevará a cabo del 11 al 13 de julio, y busca recolectar colchonetas, frazadas, ladrillos, cobijas y alimentos no perecederos. Los aportes se pueden hacer en el Hotel El Aeropuerto o a través de las líneas 3152942544, 3136374253 y 3115772165.
