Tras el desbordamiento del río Guaviare, que ha dejado decenas de viviendas inundadas y cultivos de pan coger arrasados, se han presentado quejas por la circulación de embarcaciones fluviales que agravan los daños. Según ciudadanos, las voladoras de las empresas de transporte de pasajeros y las embarcaciones de la Armada Nacional generan olas que afectan las estructuras de las casas en las riberas.
Carlos, habitante del sector de Casa Roja, expresó que las embarcaciones pasan muy cerca de la ribera, provocando fuertes olas que golpean las viviendas, algunas ya debilitadas por la inundación. “Le hacemos un llamado a la Marina y a las agencias que se dirigen a Mapiripán, que sean más prudentes, que naveguen por la mitad del río”, manifestó.
La preocupación se centra en la seguridad de las familias afectadas y en la preservación de las viviendas que aún resisten la emergencia. Carlos agregó que las embarcaciones de la Armada transitan a alta velocidad, lo que incrementa el riesgo de colapsos en las estructuras inundadas.
Ante esta situación, la comunidad pide mayor control y sensibilidad por parte de las autoridades y operadores fluviales, para evitar que las acciones de navegación empeoren los daños ocasionados por la ola invernal en la región.