Camilo González Posso, jefe negociador del Gobierno en la mesa de diálogos con el Estado Mayor Central de las Farc, explicó en Marandua Noticias la importancia de la declaratoria de conmoción interior por parte del Gobierno Nacional. Este estado excepcional responde a los recientes episodios de violencia que han sacudido regiones como el Catatumbo y Calamar, en el Guaviare, donde enfrentamientos entre grupos armados han generado un grave impacto humanitario.
El negociador indicó que la mesa de diálogos ha decidido declararse en sesión permanente debido a la magnitud de los desplazamientos masivos y la pérdida de vidas humanas. En el Catatumbo, más de 32.000 personas han sido desplazadas y 80 han perdido la vida, mientras que, en Calamar, información preliminar sugiere que 32 combatientes han fallecido. González subrayó que la situación exige una respuesta urgente y articulada por parte del Estado.
Sobre la constitución de un Puesto de Mando Unificado (PMU) solicitado desde el Guaviare, González explicó que diversas entidades están evaluando cómo implementar este mecanismo para coordinar acciones de apoyo a las comunidades afectadas. Además, hizo un llamado a las autoridades para atender las denuncias de reclutamiento forzado de menores, muchos de ellos provenientes de comunidades indígenas, que han sido utilizados en los conflictos armados.
El jefe negociador reiteró que el cese al fuego pactado entre las partes estará vigente hasta el 15 de abril y advirtió que no se permitirá la participación en la mesa de quienes continúen delinquiendo. Finalmente, insistió en el compromiso de respetar el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y proteger la vida de la población civil, especialmente en medio de los desafíos actuales.