El corregimiento de El Capricho, en el departamento del Guaviare, enfrenta una grave emergencia tras el desbordamiento del Caño La Y, provocado por las intensas lluvias de los últimos días. El nivel del agua ha alcanzado zonas cercanas al casco urbano, generando serias dificultades para la movilidad y el acceso a servicios esenciales. La situación ha dejado incomunicadas a varias comunidades, ya que ni siquiera las motocicletas pueden atravesar las zonas anegadas.
La emergencia también ha afectado gravemente el sector educativo. Varios profesores han tenido inconvenientes para llegar a sus instituciones, mientras que algunos estudiantes, en su esfuerzo por no perder clases, están asistiendo en condiciones precarias. Esta situación ha generado alarma entre los padres de familia, quienes temen por la integridad y salud de sus hijos.
La interrupción del transporte también ha dificultado la distribución de alimentos y productos básicos, agravando aún más la situación de las comunidades aisladas. Las familias afectadas han comenzado a expresar su preocupación ante la falta de respuesta inmediata y la creciente incertidumbre sobre los próximos días.
Ante esta emergencia, los habitantes de El Capricho hacen un llamado urgente a las autoridades locales, departamentales y nacionales para que intervengan con medidas que permitan mitigar los efectos de las inundaciones. Se requiere asistencia humanitaria, soluciones de movilidad temporal y acciones preventivas para evitar que la situación empeore.
La comunidad espera que la atención gubernamental no se demore y que se implementen estrategias eficaces para salvaguardar la seguridad y el bienestar de los afectados, especialmente de niños, adultos mayores y personas en condición de vulnerabilidad.
