Robinson López, coordinador de Derechos Humanos y Paz de la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana –OPIAC entregó un extenso análisis sobre los problemas interculturales al interior de las comunidades indígenas y con los mismos colonos, en este caso específicamente la situación de los Nukak en el Guaviare.
El caso más relevante es el que actualmente se registra con los indígenas que residen en el asentamiento de Aguabonita, donde se han registrado casos como una agresión verbal al personal de la Misión Médica del Guaviare, ocasionada por jóvenes que consumen bebidas embriagantes y sustancias alucinógenas.
Este hecho no ha sido reportado por los agredidos ante la OPIAC dijo López, quien también invitó a las autoridades locales a atender y a aplicar lo ordenado por la Corte Constitucional en los Autos 173 y 004 de 2009.
Aseguró que la mayor preocupación es la situación de salud, donde la desnutrición es uno de los mayores agravantes que aquejan a niños, jóvenes, adultos y adultos mayores de esta comunidad.
El pueblo Colombiano, pero especialmente las autoridades deben entender que la problemática que estas comunidades padecen son heredadas de la cultura occidental; por ejemplo: la presencia en su territorio de Grupos armados al margen de la ley, la deforestación extensiva para cultivos ilícitos.
En la actualidad son 35 pueblos indígenas del territorio Colombiano en peligro de desaparecer. Finalizó diciendo que se ha creado la Organización “Mauro Mona” del pueblo Nukak quienes atienden como autoridad las actuaciones indebidas de los integrantes de la comunidad.
