La Contraloría General de la Nación y las veedurías de Redcipaz realizaron visitas a dos centros educativos de San José del Guaviare para evaluar el estado del Programa de Alimentación Escolar (PAE). Las instituciones inspeccionadas fueron Boquerón Palmeras, con mayoría de estudiantes indígenas, y Rafael Pombo de Agua Bonita. Mientras que en la primera se evidenciaron múltiples falencias, en la segunda se destacó un funcionamiento ejemplar.
En Boquerón Palmeras, la situación es crítica. Helmut Tapias, veedor de Redcipaz, señaló que la institución enfrenta un estado de abandono. El director de la escuela informó que elementos comprados recientemente, como tanques de agua para los baños, han sido robados en menos de una semana tras su instalación. Además, la remesa alimentaria se almacena en condiciones inadecuadas, lo que afecta la calidad de los alimentos que reciben los estudiantes.
Por otro lado, la visita a la institución educativa Rafael Pombo de Agua Bonita presentó un panorama alentador. Allí se evidenció una excelente organización, higiene y compromiso por parte del personal encargado del PAE. Las fotos tomadas durante la inspección muestran cocinas impecables y un manejo adecuado de los alimentos, lo que contrasta con las condiciones observadas en Boquerón Palmeras.
Estas inspecciones dejan en evidencia las desigualdades entre los centros educativos y resaltan la necesidad de implementar medidas urgentes para garantizar que todos los estudiantes tengan acceso a un servicio de alimentación digno. Las entidades competentes están llamadas a fortalecer la vigilancia, mejorar las condiciones de infraestructura y garantizar la seguridad en las escuelas más vulnerables.
