Colombia tiene una deuda pendiente para vivir sin miedo, es la conclusión del reciente informe del Comité Internacional de la Cruz Roja -CICR-, organismo que mostró su preocupación por el aumento de la violencia en el país.
El informe destaca que durante el año 2019 se registraron 352 víctimas de artefactos explosivos y minas antipersonal, entre las que se encuentran 159 civiles.
Emilio Maroscia, jefe de la oficina CICR- Guaviare, indicó que se viene trabajando en labores del mandato estrictamente humanitario del organismo como desplazamientos masivos donde las cifras registran a 25.000 personas víctimas de este flagelo y un aproximado a 27.600 personas que permanecieron confinadas.
El informe también habla de violaciones al Derecho Internacional Humanitario -DIH-, en el cual los equipos de trabajo del CICR registraron 987 casos por amenazas, homicidios, violencia sexual y reclutamiento de menores.
Señaló que para el CICR es preocupante que los actores armados continúen irrespetando las mínimas de la guerra.