Las veedurías que han seguido de cerca la construcción del enrocado en el barrio 20 de Julio han manifestado su preocupación por la instalación de escaleras metálicas sobre esta estructura. Según los veedores, desde la primera fase del proyecto quedó prohibido anclar estructuras en esta zona, con la única excepción de las pequeñas canoas utilizadas por los pescadores. Sin embargo, han observado con inquietud la presencia de unas escaleras metálicas que conectan con un planchón anclado de forma permanente en el sector.
Ante esta situación, el secretario de Planeación, Ariel Mosquera, afirmó en entrevista con Marandua Noticias que la instalación de dichas estructuras no cuenta con permisos y que representa un riesgo inminente. Señaló que existen varios factores de peligro, entre ellos la presencia de más de tres planchones anclados, el cargue y descargue de gasolina y los horarios de operación de lo que parece ser una gasolinera flotante en una zona residencial.
Las veedurías han solicitado a la Procuraduría, el Inspector Fluvial y la Alcaldía que investiguen a fondo la situación y determinen las acciones necesarias para garantizar la seguridad de la comunidad y la preservación del enrocado.
