Campesinos de la vereda Puerto Tolima, en el sector Brazuelo del río Guaviare, denuncian que la extracción excesiva de gravilla está generando deslizamientos y poniendo en riesgo sus fincas y vías de acceso. Según los testimonios, los lancheros están sacando más de tres lanchas diarias de material, lo que ha acelerado la erosión en las riberas del río.
Los habitantes han evidenciado con videos cómo el río ha comenzado a consumir parte de la carretera que conecta varias veredas cercanas a San José del Guaviare. Esto pone en peligro la comunicación y movilidad de la región, además de amenazar las propiedades de los campesinos que dependen de estas tierras para su sustento.
Ante esta problemática, las comunidades han solicitado la intervención urgente de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Norte y el Oriente Amazónico (CDA) y demás autoridades ambientales. “Si no se toman medidas inmediatas, vamos a quedarnos sin fincas, sin carreteras y con un río que cada vez se come más terreno”, expresó un campesino de la zona.
Por su parte, las autoridades locales han anunciado que investigarán las denuncias presentadas por los habitantes, mientras se espera la suspensión de las actividades de extracción hasta que se determine su impacto ambiental y social. La comunidad, sin embargo, insiste en la necesidad de acciones concretas y rápidas para proteger el entorno y su modo de vida.
